Anoche el número 10 de Downing Street se convirtió en el centro de la moda mundial. La primera dama británica organizó una recepción (al estilo Isabel Presley) para invitados VIP de la talla de Tom Ford o Anna Wintour (directora del Vogue América). También, por supuesto, acudieron los dueños de Topshop y Mark&Spencer. Vestida con un diseño de Jonathan Saunders, SamCam se convirtió en la mejor anfitriona.