Aquí, uno de los políticos más elegantes del mundo y uno de lo peores. Seguramente, algunos consideraréis que es imposible que Hamid Karzai con esas ropas étnicas pueda encabezar las listas de los mandatarios internacionales mejor vestidos, pero hasta Tom Ford ha declarado su amor incondicional por la sofisticación del presidente afgano -sobre Rajoy, desgraciadamente no creo que ni lo sitúe en el mapa. Y es que volviendo a la polémica sobre la dignidad indumentaria que esta semana ha generado el hecho de que el líder de la CUP, David Fernández*, acuda al parlament de Catalunya con camiseta pancarta, peor es el que se las da de cumplir el protocolo del vestir diplomático occidental y lo denigra constantemente -nudo mal hecho, tejidos de pésima calidad, traje mal cortado, aspecto dejado- que el que es chungo, hippie, perroflauta (…) y lo borda. No es un tema de protocolo, es un asunto de autenticidad y valentía… Para respetar a los demás, primero hay que respetarse uno mismo.
*Nota dirigida a mi tío para que en Navidad me deje sentarme en la mesa: Aunque defienda su atuendo, no me he vuelto independentista. Lo juro.
Mejor iría vestido de gaiteiro y tapando sus guedellas.