Lo que te pongas en una situación de crisis te puede hacer ganar o perder unas elecciones. Las botas del ex canciller Gerhard Schröder lo demostraron con creces en 2002. Por eso, tras el paso de Sandy, Obama recorre las zonas afectadas con un chino beige, una camisa azul y una chaqueta impermeable azul marino con su nombre bordado. En los pies, botas de montaña para andar y andar. Romney tampoco se ha andado con rodeos y ha apostado por un estilismo más informal acorde con el delicado momento: jeans, camisa de cuadros y cazadora para reunir alimentos para las víctimas del huracán.