La industria de la moda, y todos los que hayáis visto El diablo viste de Prada, sabe que para triunfar debes obtener el beneplácito de Anna Wintour. La directora de Vogue USA es famosa por su carácter frío y prepotente y, por eso, los diseñadores tiemblan cada vez que deben enfrentarse a ella. Sin embargo, la esposa de Barack Obama ha logrado amansar a la fiera. Ayer, Michelle Obama fue la encargada de inaugurar el Anna Wintour Costume Center que acogerá el Metropolitan. Ataviada con un modelo de Naeem Khan, la primera dama estadounidense bromeó con Wintour (quien apoyó la campaña de su marido como la que más) consiguiendo que esta esbozara una sonrisa y se la viera casi feliz. Además, no faltaron las muestras de complicidad y afecto entre ellas (como diría el doctor Iglesias: «raro, raro,raro»). Michelle Obama también anunció que las dos están trabajando en un proyecto común para organizar un taller de moda en la Casa Blanca. El objetivo es que los jóvenes diseñadores encuentren el suficiente ánimo e inspiración para hacer realidad sus sueños: «Si tenéis el valor de fracasar, fracasar y fracasar otra vez hasta que finalmente tengáis éxito, un día podréis ser diseñadores legendarios como los que están aquí hoy. Un día, podréis ser líderes en la industria de la moda o en cualquier industria que elijáis».