El president de la Generalitat tiene un gran ego y a sabiendas que hoy todos iban a estar por él, se detuvo a preparar su atuendo. En tonos ahumados, el nudo de su corbata, por primer vez, estaba bien hecho. Si hubiera que votar el 25 de noviembre por acierto indumentario, por ahora, nadie superaría al líder de CiU. Sin embargo, yo, por lo menos, no quiero más de Mas. Pero viendo el panorama, no quiero a nadie más. ¡Anarquía!