Llegan las Navidades y con ellas los regalos. Si te agrada el obsequio, bien. Pero si el presente te horroriza es prácticamente imposible (por lo menos en mi caso, que no se note mi cara de «¿por qué? ¿por qué? ¿tan mal me he portado este año? ¿no habéis recibido mi carta con las indicaciones exactas para acertar?»). En fin, que mientras Mariano Rajoy está encantadísimo con la guayabera que le han regalado en Veracruz, François Hollande ha puesto cara de «tierra tragame» cuando ha tenido que posar con el abrigo y el gorro de piel tradicional con la que lo han recibido en Kazajstán.
PD. Gracias a @aleixcuberes por darme a conocer esta instantánea.