Samantha Cameron ha asumido lo que ahora es: la primera dama de Inglaterra. Y aunque a primera vista el cargo invita a la envidia, cuando hay que competir en una fiesta con las mejores modelos y celebrities, la cosa no es tan divertida. En los British Fashion Awards, la esposa de David Cameron prefirió pasar desapercibida y taparse hasta las cejas.
Tacones, horas de gimnasio, rostros perfectos… La primera dama británica acudió a los British Fashion Awards con un vestido largo negro de Osman Yousefzada que llamaba la atención por su sobriedad. Eso sí, con 39 años y tras dar a luz tan sólo hace 3 meses, SamCam lució una cinturilla envidiable. Claro que se puede seguir primera dama, sobria y discreta y ser la más elegante de la noche. Que se lo pregunten a Grace Kelly, Jackie Kennedy o Carla Bruni.