Aseguran que la princesa de Asturias no quiere que la fotografíen comprando en Decathlon y yo lo comprendo perfectamente. No pasa nada en Zara o en Mango, pero en esa firma low cost de deportes… Así que el jueves, cuando Letizia se acercó a la hora de comer (para evitar aglomeraciones), una joven que intentó capturar el momento en que la esposa del príncipe Felipe metía en su cesta una camiseta rosa Domyos (8 euros) y dos petetes que no superaban los 3 euros fue obligada por seguridad a borrar la imagen. Obviamente, eran artículos para sus hijas pequeñas pero… (Post dedicado a mi sobrina de 8 años que se ha vuelto una adicta a Decathlon «porque es el uniforme de su cole y porque una niña de su clase que se atrevió a llevar medias fue duramente criticada»… Arghhhhhh!!!! No creo que la convenza, es igual de cabezota que su tía…).
PD: Foto para un importante diario: «Te enviamos un fotógrafo». Visualicé a un hombre fotógrafo (en general, no soporto a las mujeres) y se me presenta una fotógrafa (mujer) de mediana edad vestida de pies a cabeza de Decathlon (el look incluye chanclas) y con mochila. Cabello corto y gris. Si mi radiografía sobre ella fue rápida (féminas que necesitan afearse para sentirse seguras), la suya sobre mi estilismo «princesita» ni os la cuento. Total que ambas estuvimos a puntito de enviarnos a saludar al viento unas cuantas veces. Al final, ganó ella. Es más difícil perder la compostura cuando intentas estar monísima. Resultado: Patry incómoda (como siempre que me ponen una cámara de fotos delante) y encima de morros (mi cara es siempre el espejo de mi alma).
Pues yo creo que es más triste avergonzarse de lo que estás haciendo que ir al Decathlon…en fin…si te averguenza un sitio, no vayas y punto (dirigido a cualquier persona )