Patrycia Centeno
«Es mi vida», gritó la princesa de Asturias tras despedir al Papa el pasado domingo. Enfundada en unos pantalones de cuero, Letizia disfrutó del concierto de Bon Jovi en Madrid. En su versión más rockera, la futura reina de España vuelve a regalarle motivos a la prensa para despellejarla (parece que ya no recuerde su etapa como periodista). Aunque bueno, por lo menos con alguna de sus actividades se lo pasa bien porque últimamente con la cara de hastío paga.
Hola Sol,
Acabamos de ver tu comentario y creo que nos has mal interpretado. Nosotros no estamos animando a que la despellejen, y menos por acudir a un concierto, sino comentando lo que han hecho los medios de comunicación esta semana con esa imagen. Como periodista, conoce muy bien qué es lo que van a utilizar en contra de ella, sólo decimos que debería ir con más cuidado.
Un saludo!
Tiene toda la razón la periodista Patrycia, los medios tienen la escopeta a punto para disparar a la monarquía y si se pierde no será por la princesa. Mejor un Berlusconi.
Hola: pongamos unos interrogantes a mi comentario anterior, verdad???
Creo es un despiste grande, de la asturiana princesa.
De acuerdo Centeno, yo así lo interpreté.
No es que se la despelleje por ir a un concierto, cualquiera es libre de hacerlo. Si se la despelleja es porque no se entiende que asista a los actos oficiales con cara de de hastío (como se dice en el artículo) o inlcuso de enfado (vulgarmente: cara de mala leche) y, unas horas más tarde, se la vea con una amplia sonrisa en pleno concierto. No se le está pidiendo que se ría a carcajada limpia en los actos oficiales, pero sí que tenga un mínimo de educación, ya que ella solita eligió meterse en la FR (y si no le gustaba, no haberse casado con el príncipe).
No me parece que Letizia no esté teniendo cuidado con estas cosas, más bien, todo lo contrario: lo hace a propósito. La finalidad de tal desaguisado la desconozco, pero que quiere provocar a alguien es más que evidente (súmese a esto las patadas al protocolo en el día de las fuerzas armadas, en la misa del papa, etc.)
Por cierto, en las fotografía se la ve completamente desatada, mientras las amigas están tranquilas e incluso la miran con asombro… Muy curioso.
Era tan seria que era repulsiva y repelente, siempre me desagradó la soberbia de su gesto que parecía emanar de profundas raíces. Era desagradable, un gesto altanero que hoy en día ha hiperbolizado hasta el ridículo. Y de periodista nada, por favor, reportera y locutora, para ser periodista hay que tener algo más que 7 años de experiencia en la profesión. Con tanta soberbia, no me extraña que la tal Leticia y sus amistades nos traten de tont@s, y nosotros a callar, claro, el poder es el poder. Lo que no queremos es Felipe Borbón, a ver si nos enteramos, que estamos poniendo de pantalla todo el santo día a su mujer, cuando en realidad ni pincha ni corta, y el responsable tanto del malestar que causa Letizia (estas fotos son de pena) como del descontento con la institución es Felipe. Aquí en España no hay monarquía, hay juancarlismo.
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¿Despellejarla por ir a un concierto? Esto es de locos. Ganas de molestarla. ¿No tienes algo más interesante o profundo sobre lo que escribir? Ya veo que no.
Al menos, la Princesa era una periodista seria. Apunta dos cosas: «era» y «seria».