En una visita privada a Arabia Saudí, el príncipe de Gales dejó aparcados sus trajes de gentleman y participó en un baile ceremonial ataviado con el atuendo tradicional que incluye la thawb (una túnica blanca de algodón larga hasta los tobillos y de manga larga); la besht (otra túnica exterior con estampado de cachemir); y, por supuesto, el ghutra an iqal (pañuelo de cuadros rojo y blanco doblado diagonalmente en un triangulo y sujeto a la cabeza por un cordón negro de doble vuelta). No me disgusta el look, lo prefiero al de cazador que él y sus retoños se enfundan demasiado a menudo…