Después de una jornada maratoniana, por fin llego a casa. A lo largo del día me han llegado algunas informaciones advirtiéndome de que la secretaria general del PP había escogido nuevamente el color blanco angelical para enfrentarse hoy en los juzgados al dinero negro de Luis Bárcenas. Sin embargo, compruebo ahora, con mis propios ojos, que no ha sido del todo así. Vamos, que el blazer de Mª Dolores de Cospedal era blanco pero el vestido era de un gris pálido verdaderamente revelador: ese color, en el atavío, delata falta de sinceridad. Quizá no sea culpable (que lo decida el señor juez) pero en el lenguaje de la indumentaria, la popular -por las razones que sean- no dice toda la verdad.
Patry, ¡es mi color favorito!:$