Cuando la primera dama y la secretaria de Estado de EEUU se encuentran se nota quién es quién. Y pese a que Hillary Clinton ocupó el puesto antes que Michelle Obama, desde que decidiera iniciar su carrera a la Casa Blanca renunció a su imagen de mojigata recatada (melena con flequillo o diademas y vestidos ultraconservadores). Porque aunque ahora la critiquen por sus estilismos masculinos , Clinton no ha hallado mejor escudo (traje chaqueta pantalón) para enfrentarse a sus nuevas responsabilidades. Por su parte, Michelle Obama ofendió a los americanos más puritanos al desnudar sus brazos (musculados, el encanta lucirlos) y sus piernas (unos shorts durante las vacaciones desataron la polémica -una fémina con piernas, ¡qué barbaridad!…-).
Apestáis a progres y a analfabetas: Michelle E Hillary, pardillas, por eso os gusta tanto la Ortíz