(…) A pocos meses de los comicios municipales, parece que la mayoría de medios de comunicación y articulistas nos hemos volcado en culpabilizar a Ada Colau de todos los problemas que acontecen en el universo (léase, la capital). Y me fastidia recrearme con la alcaldesa, no porque no se lo merezca sino por falta de originalidad. Sin tenerme que ocupar de los narcopisos del Raval o los manteros; después de criticar su apariencia y cinismo con ésta, su política con los perros y su insalubre iniciativa de recogida de basura puerta a puerta estaba convencida de que ya había cumplido el cupo con el gobierno del Ayuntamiento de Barcelona. Así que prometí contenerme en polemizar acerca de la desaparición de la mítica figura del ‘Tío Che‘ de la Rambla del Poblenou… SEGUIR LEYENDO