Como no se tomó un descanso estival para reflexionar, este hombre sigue siendo un alma en pena. Su dejadez tampoco ayuda. Tareas por hacer antes de iniciar oficialmente el nuevo curso: cortarse el pelo, afeitarse (también esos pelajos del cuello) y asumir que la camisa de cuello para corbata no es apta para llevarla sin. Si se cambia las gafas, la bomba.
PD. Si los deberes los hubiera hecho ayer le hubiera salido algo más barato que hoy con la maldita subida del IVA…
No sé cuántas veces lo he repetido ya, pero cuando uno opta por dejar la corbata en casa no vale ponerse cualquier camisa... ¿Pero no se da cuenta el presidente que ese cuello se abre en exceso y se le ven las miserias? Por cierto, a la camisa de Feijoo... ¿Le falta un botón? Hay ahí un agujerito...
¡Ja, ja, ja! No creo que tenga problemas con el IVA, Patry. A ver si te hace caso y mejora el look. Aunque con que mejore la gestión, me daría con un canto en los dientes. ¡Un besote!