Que el rey iba a hablar de crisis y austeridad estaba claro. Por eso, tanto Letizia como Elvira Fernández han optado por la sobriedad en la recepción al cuerpo diplomático. La princesa Letizia se ha decantado por una falda negra recta y larga con cuerpo de brillo y cuello camisero, mientras que la esposa de Mariano Rajoy llevaba chaqueta smoking y falda de vuelo en salmón (en ambas, lo que menos me ha convencido ha sido el calzado). Por su parte, sigo haciendo hincapié en la antiestética coronilla del presidente del gobierno. Tampoco podía presumir hoy mucho el monarca: ese pelo graso (o empapado en gomina) se merece un «¡¡¡¡Arghhh!!!!»
Patry, ¿qué sugieres para la coronilla de Rajoy? ¿Injertos? ¡Le estaríamos poniendo verde, seguro! En fin, no sé si tiene otra solución…
La mujer de Rajoy es guapa, desde luego. Y de doña Letizia digo lo mismo aunque la pose y el cuerpo me recuerdan un poco a la pose y el cuerpo de cierta muñequita muy conocida.
Coincido contigo en los zapatos y eso que apenas se ven. ¡Besos!