Ayer me comentaba un amigo que en una ocasión hace ya muchos años asistió a los Premios Planeta. Para el evento tuvo que alquilar un smoking porque así lo exigía la invitación. Viendo las pintas de las personalidades asistentes, el tema de la etiqueta no debe haber caído solo en el olvido sino también en el túnel de los horrores. Yo soy Felipe o Letizia y me retiro del encuadre no vaya a ser que se me contagie el mal gusto. ¡Por favor!
La de la camsiola con pantalón tobillero, taconazos y americana es la presidenta del Parlament de Catalunya, Núria de Gispert. A su lado, Helena Rakosnik con una falda negra de volantes insulsos por encima de la rodilla (preferible ocultarlas si una no las tiene aptas para lucirlas) y chaqueta de lentejuelas (sí, sí lentejuelas). Las medias marrones además le sumaban veinte años más. La camisa azul de Artur Mas, nada adecuada para la cita. Lo mismo sobre la corbata verde de Bono. Aunque Letizia está muy delgada, los príncipes destacaban entre tanto cutre.
Sobre la ministra de cultura, Ángeles González Sinde, decepción total (no esperaba menos de ella). ¿Por qué diablos va vestida de tarde de verano?
Esta última foto me hace mucha gracia: de príncipe de Shrek a príncipe de España.
Me reí con tus comentarios,al leer el post,pero te quedas corta,eres muy prudente.
Y,sí, solo se salvan los Príncipes…Creo que los demás fueron al»baúl de los recuerdos»para hacerse el look.