La noche del lunes aparecieron por las calles de Moscú varios carteles con la imagen de Putin y Medvédev vestidos de tenistas pijos. Todo parecía indicar que se trataba de una campaña de publicidad de la marca TSUM, cadena de centros comerciales de lujo, que anunciaba la «nueva colección primavera/verano 2011». Pero no, la idea ha sido fruto de un artista llamado Monolog. Al presidente ruso pero, la obra no le ha hecho mucha gracia y ordenó que se retiraran todos los carteles inmediatamente. Hace unos años, Angela Merkel también protagonizó una anécdota similar en su país al posar involuntariamente como modelo de ropa interior. Aunque en aquella ocasión sí que se trataba de una campaña publicitaria de una firma de lencería.