Rufián, un Miguel Poveda para ERC

«No se puede cantar más bonito en andalú siendo catalán», le dijo en una ocasión el Loco de la colina a Miguel Poveda… Siguiendo esta máxima -reproducir el éxito alcanzado por el coplero de cante jondo de Badalona en el país del que precisamente los indepes se quieren separar (España)- a ERC se le ha ocurrido organizar su particular Tu cara me suena y escoger a Gabriel Rufián (Súmate) como candidato a los comicios generales del 20-D. Visto así, no está nada mal la estrategia… Hasta Albert Rivera estará encantado con la elección: no sólo porque es un gran fan del arte de Poveda también porque en el Congreso podrá charlar en castellano con un republicano catalán. En fin, válgame la Soleá: » (…) si somos uno del otro, quién nos puede separar (…) Son las cosas de la vida son las cosas del querer no tienen fin ni principio, ni tienen cómo ni por qué…»

Ocho apellidos catalanes. La riqueza cultural catalana puede dar resultados estilísticos tan interesantes como el de Rufián: look de señorito relamido andaluz (crencha, americanas y pantalones entallados, jerseys de pico sobre camisas debidamente planchadas, bañado en colonia…) con pinta de garrulillo de Santa Coloma (tupé, mangas arremangadas, ciñe en el antebrazo para que se note el machaque en el gym y #pecholobo).

Súmate unos centímetros. A excepción de Loquillo, el tupé siempre ha sido de gran ayuda para todos aquellos varones con cierto complejo de altura modesta. Generalmente, ese tupé irá acompañado de alzas en el zapato (Kim Jong Un, igual que hizo su padre Kim Jon Il, es un ejemplo). Pero no desdeñemos, por Dios, la cantidad de horas que invierte el sujeto en cuestión cada mañana para que ese ejercicio arquitectónico capilar se sostenga durante toda la jornada… 

Barbero. Si el peinado tiene delito, la barba recortada con ayuda de escuadra y cartabón es también digna de mención. Eso sí, hay que reconocer que el Rufián se cuida…

#pecholobo. Total, ya no viene de uno más… Pero es que a este (al ser más joven y pasar de depilarse como Romeva) le asoma toda la pelambrera oscura… #arghhh Y que para a un tablao flamenco será lo más, pero en el escenario político es más respetuoso #unsolobotón

Perdona vidas. Tiene cara de buena persona pero es de aquellas personas que, aunque sea inconscientemente, por su lenguaje corporal (sentarse echado, clavar la punta del zapato en el suelo cuando está de pie, mirada baja despreciativa, sonrisa irónica…) parece que al hablar te esté perdonando la vida constantemente. En este arte de transmitir sin decir ni mu, podría aprender de Poveda que se antoja mucho más humilde. Al fin y al cabo, una actitud chulesca sólo descubre la proporción de falta de confianza en uno mismo.

 

 

 

150 150 Patrycia Centeno