La hija pequeña de Barack Obama ha heredado de su madre el gusto por la ropa de Asos y la facilidad para que dichas prendas se agoten nada más ponérselas. Así ha ocurrido con el jersey que llevaba Sasha el domingo en un partido de baloncesto al que acudió con su familia. A sus 12 años de edad, la niña logró robarle el protagonismo a su padre y a su madre y que todos estuviéramos pendientes del unicornio (18,69$).