Viendo que se me resistían las conclusiones del próximo libro, decidí huir y pasearme por el resto del país. Ya de regreso, el mundo ha cambiado. Dispuesta a cerrar el libro y proseguir con mi autismo de las últimas semanas, Martín Bianchi de ABC me acaba de advertir vía twitter que Cristina Kirchner ha sacado una firma de moda que lleva el nombre NyP (Nacional y Popular). Sí, así tal cual. El tema no es que sólo afecte a mi rutina diaria, también al nuevo ensayo; algo que retrasará unas horas más que me ponga con las conclusiones (desde aquí mil disculpas a mi editor… santa paciencia, el pobre). En fin, a lo que voy.
Siguiendo el viejo esquema revolucionario de «alimentar, vestir y domiciliar al pueblo», la mandataria argentina pretende que los caballeros (más adelante también se incluirá a mujeres y niños) puedan seguir engalanándose, pese a la terrible inflación, gracias a prendas a precios populares. La primera colección de NyP incluye jeans (82,50$), pantalones de gabardina, camisas lisas, oxford y a rayas (89,90$), remeras (38$), calcetines (7,90$), zapatillas (60$), que en ningún caso superarán los $ 100. Si bien el precio, por ahora, no se me antoja nada asequible, por lo menos se han apresurado en asegurar que la ropa es 100% «Made in Argentina». Y aunque tanto el vicepresidente, Amado Boudou, como el hijo de Cristina Fernández de Kirchner hayan aceptado ser los modelos de la campaña, de momento, ninguna pieza ha llegado aún al mercado.